Música, tecnología, ciencia y moda confluyen la propuesta de Viktoria Modesta, una artista pop como ninguna otra que hayamos conocido.
Nació en Letonia, pero su familia se mudó a Reino Unido cuando tenía 12 años. A los 20, Modesta se sometió voluntariamente a una cirugía para amputar la parte inferior de su pierna izquierda. Debido a un accidente médico ocurrido durante su nacimiento, su pierna quedó dañada y Viktoria pasó sus primeros años de vida inmersa en distintos tratamientos médicos que no pudieron solucionar el problema.
“Cuando tuve mi amputación experimenté la transformación de mejorarme con una parte artificial del cuerpo. Me hizo pensar en la relevancia del cuerpo. Cuánto podemos jugar con la ciencia, la tecnología y el arte, y aún identificarnos con él”, cuenta la artista.
Lo que otros habrían visto como un obstáculo, Modesta lo convirtió en un sello diferenciador: se sumergió en el mundo de la ciencia y la tecnología, impulsó colaboraciones con marcas, medios de comunicación, científicos y artistas, y transformó sus prótesis en un elemento relevante de su imagen.
En 2012 apareció como la Reina de las Nieves en la ceremonia de de clausura de los Juegos Paralímpicos de Londres, donde lució una prótesis cubierta en cristales de Swarovski.
Como destaca la revista Wired, es probable que su mayor logro artístico a la fecha sea el video de “Prototype”, que realizó en 2014 en alianza con Channel 4. Allí se convirtió oficialmente en la primera “artista pop biónica” y desafió sin pudor nuestras nociones sobre el cuerpo, la discapacidad física y los estándares de belleza.
“Para mí, lo más importante que está en mi radar es que el concepto de la tecnología y la ciencia como un cuerpo extraño es simplemente incorrecto. Creo que vamos a fusionar el cuerpo con los inventos, y nos vamos a extender. El concepto de artificialidad está casi muerto”, advierte Modesta.
Su pasión futurista no se queda solo en el discurso: sus shows multimedia incluyen experimentación con diversas tecnologías, como la LED skin (o piel LED) y las uñas impresas en 3D con sensores que controlaban la iluminación que utilizó en su presentación en el Music Tech Fest de Berlín.
El EP Counterflow, publicado el pasado mes de septiembre, es su lanzamiento más reciente. Contiene seis canciones que navegan entre la electrónica y el pop.
Su trabajo plantea la pregunta de cómo la tecnología continuará transformando el mundo del arte y nuestra propia identidad. Habrá que estar atentos a sus próximos movimientos.
