La próxima vez que vayas a un festival de música deberás armar tu mochila con bloqueador solar, botellas de agua, comida y dejar en tu casa el selfie stick, o conocido como el «palito para selfie».
Esto porque los eventos musicales Coachella y Lollapalooza, dos de los más importantes del mundo, han incluido estos dispositivos dentro de su lista de elementos prohibidos.
Se le puede dar un nuevo uso al selfie stick
Pero estos festivales no son los únicos que han tomado la decisión de restringir su uso. Desde hace un tiempo recintos británicos, como Academy Brixton y O2 Arena de Londres, también prohibieron su uso argumentando razones de salud y seguridad, mientras que el festival australiano Soundwave lo incluyó dentro del ítem «grabación ilegal» de los shows.
Asimismo, museos y recintos de arte también han negado su entrada, como la Galería Nacional de Arte de Australia, museos administrados por el Gobierno de Estados Unidos y la Galería Nacional de Londres, por posibles daños a las obras y resguardar la experiencia del visitante.
En el deporte, el selfie stick ha sido prohibido en los estadios de fútbol de la Premier League de Inglaterra, como el Emirates Stadium de Arsenal, afirmando que el dispositivo «puede ser utilizado como un arma o comprometer la seguridad pública», sumándose a otros eventos, como el Abierto de Tenis y la carrera de ciclismo de ruta Tour Down Under, ambos en Australia.
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