El pasado jueves 5 de octubre, The New York Times publicó un reportaje sobre acuerdos monetarios fuera de tribunales que el productor Harvey Weinstein tuvo con ocho mujeres por denuncias de acoso sexual, lo que ha provocado un escándalo en Hollywood.
Weinstein es una figura de la industria desde fines de los 70 cuando, junto a su hermano Bob, fundó la compañía Miramax. Ambos produjeron principalmente películas artísticas en los ’80, como Sex, Lies, and Videotape (1989) de Steven Soderbergh, que llevó a la firma a ser la productora independiente más exitosa en ese entonces.
En 1993, Disney adquirió Miramax pero Harvey siguió a la cabeza de la compañía. Su primer éxito vino ese año con Pulp Fiction de Quentin Tarantino, y luego la firma ganó un Oscar por El Paciente Inglés (1997). También fue parte de En busca del destino (1997) y Shakespeare apasionado (1998), en esta última con Weinstein consiguiendo su único Oscar como productor.
En 2005, los hermanos dejaron Miramax y fundaron The Weinstein Company, otra compañía productora que ha tenido decenas de éxitos de taquilla, como Django Unchained, Bastardos sin Gloria, El Discurso del Rey y Silver Linings Playbook.
El destape del escándalo
El reportaje de The New York Times afirmó que por décadas Weinstein pagó altas cifras para evitar que salieran a la luz sus conductas sexuales inapropiadas con actrices y postulantes a trabajar detrás de cámara.
Según la publicación, a menudo las mujeres eran citadas a una habitación de hotel por el productor, con la excusa de discutir algún tema laboral. Al llegar al lugar, las mujeres encontraban a Weinstein con poca ropa y éste les pedía que le hicieran masajes o presionaba para conseguir un encuentro sexual.
Luego de la publicación, varias figuras de Hollywood dieron su testimonio al periódico estadounidense en un segundo artículo. Una de ellas fue Angelina Jolie, quien expresó: «Tuve una mala experiencia con Harvey Weinstein en mi juventud y como resultado elegí nunca volver a trabajar con él y advertir a otras cuando lo hacían».
Gwyneth Paltrow también reveló que cuando tenía 22 años fue llevada a una habitación de hotel y Weinstein le pidió que le hiciera un masaje. Le comentó a su novio de ese entonces, Brad Pitt, quien lo confrontó. Posteriormente, el productor le advirtió a la actriz que no debía volver a decirle a absolutamente nadie lo que sucedió. «Era una niña, ya había firmado el contrato, estaba petrificada», dijo Paltrow.
Rose McGowan, Ashley Judd y Rosanna Arquette son otras de las figuras que dieron su testimonio sobre el reprochable comportamiento del productor desde, al menos, la década de los 90.
Días después del primer reportaje de The New York Times, la revista The New Yorker también publicó una investigación sobre Weinstein en la que tres mujeres afirman que fueron violadas por el productor, además de incluir una grabación policial en la que parece admitir haber manoseado a la modelo Ambra Battilana Gutierrez sin su consentimiento.
Ese artículo también dice que al menos 15 antiguos y actuales ejecutivos de la compañía dijeron que fueron testigos o tenían conocimiento de comportamientos sexuales predatorios y tocaciones en eventos asociados con las películas de Weinstein y en el lugar de trabajo.
Las reacciones
En el mismo reportaje de The New York Times, el propio Weinstein declaró: «Reconozco que la manera en la que me he comportado con colegas en el pasado ha causado mucho dolor y me disculpo sinceramente».
El martes 10 de octubre, la esposa del productor, la diseñadora Georgina Chapman, emitió una declaración a través de People: «Mi corazón se rompe por todas las mujeres que han sufrido un tremendo dolor a causa de estas acciones imperdonables. He decidido dejar a mi marido. Cuidar a mis hijos pequeños es mi prioridad y le pido a los medios de comunicación privacidad en este momento».
Figuras del espectáculo y hasta políticas han reaccionado al escándalo. Meryl Streep afirmó: «Las mujeres intrépidas que levantaron sus voces para exponer este abuso son nuestros héroes. Una cosa puede aclararse: no todo el mundo lo sabía».
Leonardo DiCaprio expresó: «No hay excusa para el acoso sexual… no importa quién es usted y no importa qué profesión». En tanto, Charlize Theron dijo: «Aunque no tuve una experiencia personal como esta con Harvey Weinstein, lamentablemente no puedo decir que estoy sorprendida. Esta cultura siempre ha existido, no solo en Hollywood sino en todo el mundo».
Por su parte, la modelo y actriz Cara Delevingne reveló una situación con el productor, afirmando que le propuso un encuentro sexual junto a otra mujer. «Nos pidió que nos besáramos y ella comenzó a hacer ciertos avances en su dirección. Me levanté deprisa y le pregunté si sabía que podía cantar. Y empecé a cantar, pensé que haría la situación mejor., más profesional, como una audición, estaba tan nerviosa».
Hasta el ex Presidente Barack Obama declaró sobre la situación, tomando en cuenta que Weinstein fue donante del Partido Demócrata. «Cualquier hombre que humilla y degrada a las mujeres de ese modo tiene que ser condenado y responsabilizado, sin importar su riqueza o estatus», dijo en un comunicado.
Pero también la industria ha reaccionado: los festivales de cine de Cannes, Berlín y Venecia condenaron el comportamiento de Weinstein. La Academia de Hollywood calificó como «repugnante, abominable y antiético» lo hecho por el productor y el sábado 14 definirá si lo expulsa como miembro.