José Biggs ha estado toda su vida dedicado a la música. Como autodidacta en su adolescencia, como parte de una banda en el colegio. Estudió composición en el Conservatorio y se dedicó a la música de televisión y de cine. Y ahora, llega con su primer proyecto discográfico: Biggs.
El compositor chileno entró en la escena al participar en la banda sonora de la película Velódromo (2010), del director Alberto Fuguet, con quien volvió a trabajar en Invierno (2014). En 2015 lanzó su primer single y un año después fue parte del cartel del festival Fauna Primavera. Y desde ese momento, su creación artística no se ha detenido.
Su primer disco, Biggs, fue lanzado oficialmente el pasado 24 de mayo, editado bajo el sello español Calaverita Records, el mismo que ha trabajado con Anita Tijoux. Y los medios le han dado buena acogida: la revista Mondo Sonoro, una de las más importantes de España, fue la que anunció el estreno. “No esperaba que me publicaran tanto los medios. Ha sido un poco sorpresivo que me hayan acogido tanto, que estén dispuestos a que vaya de nuevo, que haga más cosas. Ha sido muy bonito”.
– ¿Cómo y cuándo comienza a gestarse este proyecto?
Mi proyecto musical en sí nace con un evento personal que me marcó mucho, que fue la muerte de mi mamá. En homenaje a ella comencé a ocupar Biggs, el apellido de mi madre. La primera vez que salí cantando fue en la película Velódromo, esas fueron las primeras luces del proyecto, y luego en Invierno, también canté el tema central. En ese tiempo comencé a indagar en este nuevo estilo que estaba desarrollando y en 2015 lancé “Te vas”, que es el primer single del álbum. Entonces si me preguntas dónde parte esto, en teoría es en 2015 con “Te vas”. Pero hay un camino recorrido atrás que creo que es importante. Ha sido un desarrollo largo para llegar hasta acá. Estuve en una incubadora mucho tiempo.
– ¿Y cómo fue el proceso de creación, de escribir las canciones, y de seleccionar las 10 que finalmente aparecen en el álbum?
Cuando entramos a grabar este disco con Cristian Heyne, el productor, me preguntó hacía cuánto no componía, yo le dije «hace seis meses», y él me dijo «trae algo nuevo mañana». Y esa canción nueva fue “Te vas”. Ahí se nos abrió un mundo, porque fue algo totalmente distinto a lo que yo había hecho antes. Después de eso estuve tres meses encerrado componiendo todos los días y logré juntar como 60 canciones. Las 10 que elegimos finalmente son las que hacían más sentido estando juntas, que podían armar un concepto. En total fueron tres meses de composición y un año y medio de grabación.
– ¿Y con qué músicos trabajaste durante las grabaciones? ¿Quiénes colaboraron contigo en el disco?
Hay hartos colaboradores, de partida en batería estuvo Leo, el baterista de Astro, que tocó en una canción. También Max Reyes, un baterista que ha tocado con Los Tetas que tiene una onda muy de música negra; de Los Tetas participó también C-Funk. Colaboró en el disco Erika Spring, la vocalista de Au Revoir Simone, que es una de mis bandas favoritas. Aparece cantando en español en la canción “Tu y yo”. Fue algo muy heavy, muy bonito.
– En el disco trabajaste, como decías, con Cristian Heyne, ¿cómo nació esa dupla Biggs-Heyne, cómo funciona y cómo ha sido tenerlo como parte de tu primer disco?
Ya son años de conocer a Cristian. Velódromo fue en 2010, y eso surgió porque Fuguet estaba buscando a alguien para el soundtrack, alguien que hiciera el cover de “Raindrops keep falling on my head”. Se lo pidió a Mike Patton, pero por suerte para mí él estaba de gira, así que le preguntó a Heyne si se le ocurría alguien. Por ahí parece que yo estaba en el radar y me contactaron e hicimos esa versión. Ahí fue cuando conocí a Cristian y siempre hemos permanecido cerca. No sabría bien cómo decirlo, pero creo que él ha sido una especie de psicólogo musical. En el proceso de búsqueda del disco mis composiciones fueron cambiando mucho, y él estuvo ahí, fue parte de eso. Así que sí, es como un psicoanalista.
– Acerca de los singles del disco, has dicho sobre la canción “Conjuros de luna”: “viene con tanta vida propia, que incluso existía en mí antes de componerla”. ¿Cómo funciona ese proceso creativo, de dónde vienen estas canciones?
Sí, esa frase es muy chistosa, y es verdad que la dije. A lo que me refiero con “Conjuros de luna”, y creo que con gran parte de las 10 canciones del disco, es que no tuve que estar un mes luchando para parirlas. Venían ya muy armadas desde el comienzo, quizás las temáticas ya las tenía súper bien desarrolladas en mi cabeza, los conceptos claros. Yo me pongo a improvisar frente a un instrumento, ya sea el piano, la guitarra, el bajo, y me pongo a cantar, y así empiezan a salir las canciones. Con esa frase me refería a que en esas improvisaciones salía mucho material en bruto, a que gran porcentaje de la canción ya estaba lista en los primeros 10 minutos.
– Luego de este lanzamiento, ¿qué se viene los próximos meses? ¿Podremos escuchar el álbum en vivo pronto?
Sí, estoy en eso, se vienen muchas fechas de promoción, tocando el disco en vivo, espero estar en regiones también y no sólo en Santiago. Voy a ir anunciando las fechas en redes sociales.
El disco Biggs fue lanzado en todas las plataformas digitales y puedes escucharlo aquí.