El domingo 2 de abril, The Walking Dead estrenó el último episodio de su séptima temporada, cerrando un ciclo que ha sido criticado por su lentitud y poca emoción.
Aunque comenzó con un capítulo de alto impacto, esta séptima temporada se fue desinflando a medida que avanzó, dejando un sabor amargo que ni siquiera el sorprendente final pudo desaparecer.
Por ello, aquí entregamos razones para olvidar lo que fue esta séptima temporada de The Walking Dead:
1. El rating
Aunque se habló de que en Latinoamérica las emisiones de The Walking Dead tuvieron un aumento en la audiencia, en Estados Unidos, su país de origen, la cosa fue una catástrofe. Si el primer episodio tuvo 17 millones de espectadores estadounidenses, el siguiente la cifra bajó a 12.5 millones.
Y de ahí, el rating siguió en picada. De hecho, «Say Yes» (el episodio 12) fue visto por 10.2 millones, la cifra más baja desde «Hounded» (el sexto de la tercera temporada), emitido en noviembre de 2012, visto por 9.5 millones de estadounidenses.
2. Cantidad de capítulos
A esta altura, y luego de haber terminado esta temporada, salta la pregunta ¿Es necesario que se emitan 16 episodios? Para este tipo de producciones y con los cambios en el hábito del consumo de series, sería ideal acortar el número de capítulos.
Quizás seguir el ejemplo de Game of Thrones, cuyas dos temporadas que le quedan tendrán menos episodios que las anteriores, lo que fue valorado por los fanáticos.
3. Lentitud
Después de ese impactante primer episodio, las expectativas estaban en que el resto de la temporada tuviera la más emoción, intriga y suspenso. Pero finalmente aparecieron episodios lentos, sin generar una curiosidad. Más bien, el sentimiento fue de que terminaran luego.
4. Problemas con el guión
Además de la lentitud, los episodios también se tornaron monótonos y sin peso para la trama. Habían también espacios en la historia que nunca fueron resueltos, como la historia previa de Negan antes de encontrarse con Rick.
5. Efectos especiales
Nadie duda del trabajo de maquillaje de The Walking Dead encabezado por Greg Nicotero (que además es productor y director de capítulos). Los caminantes son uno de los atractivos de la serie y cada vez que aparecen sorprenden por su calidad estética.
Pero ese aplaudido trabajo no se tradujo en uno de los peores errores de la serie: en «Say Yes», mientras Rick y Michonne están en el parque de atracciones, aparece un ciervo creado con computador. No hay problema con que se usen este tipo de herramientas, pero en este caso es evidente y pasó de ser un momento tenso en la trama a casi generar risas.
6. Maggie ignorada
Uno de los personajes clásicos que van quedando en la serie es Maggie, que sufrió la pérdida de Glenn en manos de Negan y ahora embarazada quiere hacerse cargo de Hilltop.
Pero en estos 16 capítulos, su labor como líder y lo que vivió tras perder a Glenn no apareció por ni un lado, siendo el personaje en el que la mayoría de los espectadores pondrían su atención luego de lo que hizo Negan. Al contrario, vimos más a Salvadores, a Dwight, a Eugene y hasta Gregory.
7. Muchos personajes
En estos 16 episodios aparecieron más comunidades, más líderes, y eso llevó a la larga a un aumento en la narración que a veces se tornó algo agotador. No era necesario mostrar tanto a Jesús, Sherry y Richard, por ejemplo.