Estar en frente de una obra de arte como La Gioconda de Leonardo da Vinci puede producir las más grandes emociones. Sin embargo, ¿cómo puede experimentarlo alguien que no puede ver?
Esa es una de las interrogantes que llevó al programador de software y diseñador finlandés Marc Dillon a ser la voz de Unseen Art, proyecto que pretende acercar el arte audiovisual a personas no videntes. “Estamos creando una nueva oportunidad para que las personas ciegas y con deficiencias visuales experimenten el arte”, mencionó.
La idea es dar a obras pictóricas, como la de Da Vinci, un tratamiento en 3D para que puedan ser táctiles y, por lo tanto, accesibles a quienes no pueden ver.
“Hay muchas personas que sólo han escuchado del arte y de algunas de las pinturas más icónicas, pero no han podido verlas. Ahora podrán experimentarlas por primera vez”, menciona Dillon.
El diseñador, quien confiesa que el tema le toca de cerca pues nació con una discapacidad que afectó el crecimiento de uno de sus brazos, trabaja actualmente con Adventure Club, empresa que se encuentra buscando financiamiento para replicar y difundir el actual modelo, el que espera, no sea el único. “Me emociona mucho poder ver el impresionismo y por supuesto ‘La noche estrellada’ de Van Gogh”, dijo.
Unseen Art está actualmente en busca de apoyo económico a través de una campaña de financiamiento compartido en Indiegogo.com, plataforma en la cual están ofreciendo impresiones gratuitas de la Mona Lisa a quienes colaboren para llevar adelante el proyecto.
Todo el dinero recaudado será utilizado para costear una plataforma a través de la cual los modelos puedan ser descargados de manera gratuita. Así sólo bastará poseer una impresora 3D para tener una reproducción en 3D de grandes obras maestras.