A comienzos de este año recibimos la noticia de que el poblado sudafricano de Ciudad del Cabo se transformaría pronto en el primer lugar del planeta en quedar completamente seco, hecho que ha obligado a las autoridades y a la comunidad a tomar medidas extremas. Pero al parecer la solución sería más fácil de lo pensado y el maestro de salvamento Nick Sloane cree saber cuál es.
El proyecto consiste en arrastrar icebergs desde la Antártica al continente africano. Así, tal como suena, una idea que de tan lógica pareciera ser imposible, pero que según Sloane tiene el método apropiado para lograr transportarlos sin que se derritan en el camino, afirmando que el trayecto es corto y que si se logra ayudaría a mitigar el agudo problema.
«Queremos mostrar que si no hay otra fuente para resolver la crisis del agua, tenemos otra idea en la que nadie más ha pensado aún», explicó el especialista a Reuters, y agregó que su equipo podría atrapar icebergs en coberturas de tela para mantenerlos aislados y usar tanques para remolcarlos hasta Ciudad del Cabo, así podría producir cerca de 150 millones de litros por día durante un año, un tercio de lo que necesita la ciudad.
La historia de Nick Sloane
Nick Sloane nació en Sudáfrica y saltó a la fama cuando, en 2013, se transformó en un verdadero héroe al guiar las labores de estabilización del buque italiano Costa Concordia que un año antes se había encallado en la Isla del Gioglio, dejando a 30 fallecidos y dos desaparecidos. Un movimiento que permitió retirarlo del lugar en el que permanecía atrapado.
Ahora, a 5 años de ese hecho, el maestro de salvamento está en busca de inversionistas privados y ayuda del gobierno para transportar a través del océano estos grandes bloques de hielo para colaborar en la solución de la catastrófica sequía que azota a su país después de que 2015 y 2016 se convirtieran en los años más áridos de la historia.
Para fines de este mes está fijada una conferencia en la que intentará vender este proyecto que requiere 130 millones de dólares, en una idea que se ha planteado en informes científicos, libros y hasta en películas, pero que hasta el día de hoy no se ha llevado a cabo. Quizás esta sea la solución que necesitamos, distribuir los recursos por todo el mundo.