Después de ocho años de investigación y fabricación, este jueves 24 fue presentado en Londres el Bloodhound SSC, el vehículo de carreras más rápido del mundo jamás construido.
El coche aún no está terminado pero ocho mil personas podrán ver de cerca el auto en una exposición en la ciudad inglesa. Allí, los visitantes podrán mirar dentro de la cabina: un monocasco enorme y complejamente elaborado a partir de múltiples capas de fibra de carbono.
En el interior hay un tablero de instrumentos digital sofisticado, diseñado por el conductor, así como manuales de copias de seguridad para los principales controles.
Tiene tres sistemas separados de frenado, siete extintores y 500 sensores, dos veces más que un coche de Fórmula Uno, para que los ingenieros sepan exactamente cómo se comporta durante cada carrera de alta velocidad.
Para llegar a los 1.609 kilómetros por hora, el vehículo posee un motor Rolls-Royce EJ200 de tres propulsores y otro motor Jaguar V8 utilizado por la compañía de cohetes Nammo.
La máquina comenzará a correr el año que viene en una pista especial que se ha preparado en Sudáfrica. En esa ocasión, el público podrá disfrutar de la misma vista que el piloto Andy Green y ver la misma información a través de las 12 cámaras que están dispuestas en el coche, dos de ellas en el interior de la cabina.
Revisa a continuación un video con la presentación del vehículo y algunas imágenes de la fabricación del Bloodhound SSC:
Fotos: Stefan Marjoram