El legendario Studio Ghibli, creador de algunas de las películas de animación más hermosas de la historia, cumple tres décadas y lo celebra con una exposición retrospectiva en lo alto de la Torre Mori del complejo Roppongi Hills de Tokio.
En junio de 1985 nació el estudio de animación fundado por Hayao Miyazaki, Isao Takahata y Toshio Suzuki, y 14 meses después se estrenó El Castillo en el Cielo, su primera producción.
Aquella temprana entrega develó algunos de los elementos que caracterizan el trabajo de Miyazaki y su equipo: delicadeza visual, paisajes deslumbrantes, temáticas que mezclan realidad y fantasía, un profundo respeto por la naturaleza y la fascinante complejidad de sus personajes.
Además de fotos, bocetos, afiches y recortes de prensa, la Studio Ghibli Expo incluye una colección de máquinas y naves voladoras extraídas de distintas películas, que cuelgan del techo del Roppongi Hills Tokyo City View, ubicado en un 52º piso, y se iluminan en la noche.
Los visitantes también se encontrarán con los dos personajes más emblemáticos del clásico Mi vecino Totoro: un gatobus (Nekobasu) gigante, en donde se puede entrar y tomar asiento, y con un Totoro de peluche ubicado detrás del mesón de un bar.
Para completar la experiencia, el café The Sun -ubicado en el mismo piso- ofrece un menú especial con platos, bebidas y postres inspirados en las películas del Studio Ghibli, como el pan con huevo frito que Pazu le prepara a Sheeta en El Castillo en el Cielo.
La exposición estará abierta hasta el 11 de septiembre. El precio de la entrada, inicialmente fijado en 2300 yenes, se redujo a 1800 yenes (alrededor de 18 dólares) a pedido del productor Toshio Suzuki.
Dos semanas antes de la inauguración, Suzuki se disculpó públicamente por «haber sido egoísta» y anunció el recorte en el valor del ingreso, igualándolo al costo de una entrada al cine en Japón, y explicando que su intención era que mucha gente pudiera ver «el sudor y las lágrimas que Studio Ghibli ha puesto en sus trabajos por 30 años «.