Casi un mes después de que la empresa Blue Origin enviara un cohete a 100 kilómetros de altura y lograra que volviera a la superficie sin daños, SpaceX finalmente pudo concretar el regreso de un vehículo a la Tierra luego de varios intentos.
La empresa de Elon Musk venía probando los cohetes reutilizables desde principios de 2015, aunque con resultados negativos en las dos ocasiones que intentó: en enero y abril, el dispositivo volvió a una plataforma ubicada en el Atlántico pero se destruyó a pocos metros de la llegada.
Ahora, la compañía envió su Falcon 9 desde Cabo Cañaveral, en Florida, con una tarea específica: colocar 11 satélites en órbita. Tras hacerlo en el Espacio, el cohete inició su descenso y toco tierra 10 minutos después de su despegue, de forma vertical y sin ningún problema.
En noviembre, Blue Origin (fundada por Jeff Bezos) lanzó el New Shepard hasta 100 kilómetros de altura, que se considera el límite entre la atmósfera y el Espacio exterior. Por ello, lo hecho por el Falcon 9 es histórico al ser el primer cohete que pone cargas en órbita y vuelve a la superficie, lo que es un gran paso para la reducción de costos en las futuras misiones espaciales.
There and back again pic.twitter.com/Ll7wg2hL1G
— Elon Musk (@elonmusk) diciembre 22, 2015
Bezos (fundador también de Amazon) no dudó en felicitar a Musk por lo hecho con SpaceX, devolviendo el saludo que el creador de Tesla Motors había enviado luego del éxito del New Shepard en noviembre. «Bienvenido al club», expresó.
Congrats @SpaceX on landing Falcon's suborbital booster stage. Welcome to the club!
— Jeff Bezos (@JeffBezos) diciembre 22, 2015
La carrera espacial por los cohetes reutilizables ha comenzado.